Rusia lanzó el 26 de febrero el primer ejemplar de su nueva generación de satélites de navegación y posicionamiento. Un cohete Soyuz-2-1b Fregat despegó a las 03:07 UTC desde el cosmódromo de Plesetsk, y situó a su carga, el Kosmos-2470, en la esperada órbita de referencia.
El vehículo situado a unos 19.000 Km de altitud es el primero de dos prototipos de la serie GLONASS-K. Dicha serie es la tercera generación de la longeva familia de satélites de navegación rusos, diseñados para proporcionar una mayor vida útil (al menos una década), y una señal adicional para su servicio de posicionamiento.
Con un peso de 935 kg, el satélite construido por la compañía ISS Reshetnev sobre una plataforma Ekspress-1000A podrá proporcionar información de posicionamiento con una precisión civil de 100 metros y de 10 a 20 metros para los militares. El vehículo transporta también una carga para el sistema internacional COSPAS-SARSAT para rescates.
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